EL RESENTIMIENTO

Jesucristo señalaba que la puerta de la perdición es ancha muy ancha, esa puerta estoy segura, la abre con su gran llave de oro el resentimiento. 


Este señor llamado resentimiento te lleva a la destrucción de ti mismo, 
de las personas y seres que amas, de todo tu entorno, de tu realidad.


Hay otro camino para liberarse del resentimiento.

 Decía Jesucristo " la puerta de la salvación es angosta, muy pero muy angosta" y estoy segura que esa puerta de la salvación tiene un pequeñito nombre se llama el perdón.